En 1907, María Montessori pone en marca la Casa dei bambini en uno de los barrios bajos de Roma. Esto supuso un antes y un después en la educación infantil. María Montessori dio la vuelta a la forma de enseñar hasta ese momento. De repente, el niño se encuentra en el centro de la educación, algo que no sucede en la educación convencional. María Montessori defendía que si algo tenía que adaptarse en la educación, era la escuela al niño y no al contrario.
En el método Montessori los niños se desarrollan en un ambiente preparado
¿Y qué es exactamente un ambiente preparado? El “entorno preparado” es aquel que promueve la autonomía y libertad del niño. Entre los 0 y los 6 años, el niño se nutre del entorno, por eso es importante que el ambiente y la distribución, sean aptos para potenciar al máximo el aprendizaje del niño.
En un concepto más amplio, el término ambiente preparado, hace referencia a mucho más que los espacios donde se desarrolla la vida del niño (el aula escolar, su habitación, cualquier espacio físico). El ambiente preparado también tiene que ver con las personas con las que el niño se relaciona, así como las actividades que se le proponen a la criatura.
Es indudable que la atmósfera y el ambiente en un aula de educación infantil son importantes para el desarrollo integral de los niños.No todo es material en el entorno preparado Montessori
Un ambiente preparado no solo se refiere a lo físico, a la estancia, los materiales o el espacio. El ambiente preparado, también tiene que ver con aspectos como: el orden material, orden de vida, ritmos estructurados, horarios que cumplir, etc. La armonía y el amor, son ingredientes importantes en la receta de un buen ambiente preparado.
Prepara tu ambiente Montessori en casa
Los ambientes preparados Montessori tienen algunas características en común:
Orden
En los espacios preparados Montessori cada cosa tiene un lugar y siempre es el mismo. Un rincón para los libros, el cajón de las cosas, el rincón de los juguetes. Cada cosa se retira y se devuelve a su lugar cuando se ha finalizado su uso, Un ambiente ordenado facilita el aprendizaje.
Menos es más
Tener pocos materiales en el ambiente preparado Montessori ayudará a que el niño pueda mantener el orden más fácilmente. Además, que haya un número limitado de objetos permite al niño valorar mejor cada cosa. Si el niño tiene muchos materiales o juguetes, en su mente pierden valor. Si hay algo que el niño no utiliza, es mejor retirarlo y no substituirlo por otra cosa. Por ejemplo, en la zona de los juguetes puedes tener media docena al alcance del niño e ir rotándolos.
No sobrecargar de estímulos el ambiente
A menudo los espacios infantiles suelen estar sobrecargados de estímulos para la mente absorbente de los niños. Muchos muebles, colores, saturación de estímulos. Esto es justo lo contrario a un ambiente preparado Montessori. Si queremos que el niño absorba la información de sus propias experiencias con los materiales Montessori. El espacio no debe ser una distracción, sino ser un ambiente neutro, acogedor y diáfano. Es decir, que la atención del niño se centre en el material o actividad y no en el entorno.
La importancia del movimiento libre
No vamos a repetirnos con la importancia de los espacios donde el niño se puede mover libremente, pero si vamos a recordar algunos detalles.
Al crear el ambiente preparado Montessori, trata de evitar los obstáculos, que todas las zonas del espacio estén al alcance del niño y que todo lo que esté a su alcance pueda ser explorado sin riesgos.
Los espacios Montessori en casa
Ahora, que con esta situación pandémica pasamos mucho más tiempo en casa, podemos adaptar algunos rincones de la casa para que sean lugares de crecimiento en el desarrollo del niño.
El dormitorio Montessori
El elemento clave que diferencia un dormitorio de cualquier otra estancia es la cama. La cama es un elemento importante para fomentar la independencia del niño. Si el pequeño puede acostarse y levantarse sin ayuda se sentirá mucho más autónomo. Es importante que la cama esté a su altura. Además, si en lugar de colchas y sábanas, en la cama del niño pones un edredón nórdico, el niño puede responsabilizarse de hacer su cama desde pequeño. Esto promoverá su independencia.
La ordenación en el espacio Montessori
Si buscamos fomentar la autonomía e independencia del niño. Vestirse solo, elegir su propia ropa o participar en las tareas de casa son algunas formas de fomentar la autonomía. Por ejemplo, guardando su ropa después de hacer la colada, Para ello, el armario tiene que permitir acceder fácilmente al niño a sus cosas. Lo ideal es que no tenga puertas, además de eliminar barreras, facilitaremos que el niño guarde, elija y ordene su ropa con facilidad. Los cajones deben ser seguros, aunque lo ideal es que sean baldas abiertas donde los objetos se ordenen en cestas o cajas. Y quizás, lo más importante es que todo esté a su altura.
Una biblioteca de conocimientos
A la hora de crear un rincón de lectura, con su espacio para libros y demás no debemos pensar como adultos sino como niños. Por ejemplo, en una estantería los adultos ordenaríamos los libros como siempre para así aprovechar al máximo el espacio.
Para el niño, será más interesante poner los libros de frente, aunque quepan muchos menos. Estaremos creando un ambiente más pedagógico que eficiente. Puede que tengamos más libros que los que caben con este sistema de ordenación. Una buena idea es ir rotándolos, así el niño dispondrá de diferentes estímulos y aprendizajes. En cuanto a la temática, lo ideal es que los libros y cuentos hablen de cosas relacionadas con la naturaleza y que las historias sean reales y no se desarrollen dentro de un mundo fantástico.
El vestíbulo clave en los espacios Montessori del hogar
El hogar es mucho más que 4 paredes, para el niño es la referencia del núcleo familiar. Al llegar a casa debe sentirse acogido (esta sensación es buena tanto para niños como adultos). El vestíbulo tiene que tener un pequeño banco y un perchero a su alcance. Esto facilitará que al llegar a casa el niño se responsabilice de cambiar sus zapatos y colgar su abrigo. ¿Qué se trabaja? Lo que se trabaja con este “ejercicio de responsabilidad” es la autonomía y el orden.
La cocina
En la cocina ocurre gran parte de la vida social de una casa. Para el niño, es importante participar en las rutinas y roles del resto de la familia. El niño se sentirá uno más, y su autoestima crecerá. Puedes darle pequeñas tareas en el proceso de preparar la comida. Al igual que hay objetos de papelería diseñados para niños, también hay utensilios de cocina pensados para eliminar los riesgos a la hora de participar en las tareas de casa.
La educación alimentaria también se trabaja en estos primeros años de vida, ¿Cómo? Puedes aprovechar y hacer partícipe al niño en la preparación de los platos que no le gustan tanto. Por ejemplo, las verduras. Son muy pocos los niños que adoran las verduras, pero si participa en la elaboración del plato y lo convertimos en algo atractivo para él, seguro que lo come mejor.
La torre de aprendizaje, un elemento clave en la seguridad y desarrollo del niño
Suena muy bonito todo esto de cocinar con el niño, pero la cocina en principio no está pensada para los pequeños de la casa. Un detalle importante, es que para que los niños puedan nutrirse de nuevos aprendizajes, se sientan seguros.
Entre el material Montessori la torre de aprendizaje es uno de los muebles estrella y permitirá que el niño realice las mismas actividades que el resto de la familia. Le permite hacer lo mismo que los demás, a la misma altura que los mayores, pero de forma independiente a la par que segura.
La torre de aprendizaje Montessori no fue creada por María Montessori. En sus escuelas el ambiente se adaptaba a la altura de los niños y no tenía mucho sentido un material como este. Pero un hogar es diferente, todo está a la altura de los adultos, y aunque hay partes que se pueden adaptar a la estatura del niño, hay otros ambientes de la casa que no.
La torre de aprendizaje Montessori potencia su autonomía e independencia permitiendo que participe en las tareas como uno más de forma segura.
¿Por qué comprar una torre de aprendizaje Montessori en lugar de usar un taburete alto o una trona?
En torno a los 18-24 meses los niños se mueven de manera autónoma, ya han adquirido el suficiente equilibrio y motricidad, además están en un momento en el que quieren explorar su entorno, y ver el mundo desde la misma altura que los mayores. La torre de aprendizaje, con su robustez y sus barras anticaídas, le proporcionará esa seguridad al niño y la tranquilidad al adulto
¿Por qué gastar el dinero en una torre de aprendizaje Montessori si para subirse alto ya tengo taburetes en casa?
La estructura de la torre de aprendizaje con barandillas y barreras permite a los niños subirse y estar seguros en ella, sin riesgo de caídas. Con una silla o taburete tendrás que estar supervisando que no se caiga. Además, de la torre pueden subir y bajar solos, fomenta la autonomía y las torres están diseñadas para proporcionar una seguridad que las sillas y taburetes altos no pueden ofrecer.
En Habitar las Formas, fabricamos de manera artesana la torre de aprendizaje Montessori. La torre también es convertible en pupitre y está fabricada en madera de abedul de la mejor calidad. En Habitar las Formas solo empleamos materiales naturales para fabricar nuestros productos. También las ceras y pigmentos que utilizamos son naturales, sostenibles y no tóxicos.
Recuerda, un ambiente preparado Montessori es el que cumple con los cuatro pilares Montessori: autonomía, libertad, pertenencia y belleza.
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http://asociacionmontessori.net/blog/
https://psicologiaymente.com/desarrollo/mente-absorbente-del-nino-segun-montessori
https://www.buscabiografias.com/biografia/verDetalle/4482/Maria%20Montessori
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